La Sala de exposiciones de San Eloy acoge una retrospectiva de la obra del pintor salmantino González Ubierna
El Ayuntamiento de Salamanca y la Fundación Caja Duero presentan la exposición “Los rincones de Ubierna”, una retrospectiva de la obra del pintor José Manuel González Ubierna (Salamanca, 1900 – 1982) que se podrán visitar en la Sala de San Eloy desde hoy hasta el 20 de noviembre.
La exposición muestra cuadros del artista propiedad de diferentes instituciones salmantinas y de colecciones privadas y está compuesta, no sólo por las famosas vistas de Salamanca, sino también por los cuadros de rincones ya desaparecidos de la ciudad del Tormes, así como las marinas y los paisajes norteños que el artista solía pintar en sus veranos en Cantabria.
La última gran exposición de González Ubierna tuvo lugar en Salamanca en el año 2000, con motivo del centenario de su nacimiento. En la presente exposición se exponen más de 60 obras del artista que supo recrear la Salamanca del siglo XX como pocos, ha dicho el comisario de la muestra.
Como complemento de la exposición, el espacio alternativo La Salchichería colgará en sus salas obras de Ubierna en la muestra titulada “Salamanca, de Ubierna a Perro Chico” en la que, junto a obras del pintor salmantino, se exhibirán fotografías del colectivo de fotógrafos “Perro Chico” que mostrarán los mismos rincones pintados por el artista, pero en su estado actual. Así, y como ejemplo, junto al cuadro del pintor “Casas de la Puerta del Río”, que data de 1960, se colgará una fotografía de las mismas dimensiones, con el mismo enclave, pero con la perspectiva actual de uno de los fotógrafos del colectivo.
Las dos exposiciones permanecerán abiertas del 6 de octubre al 20 de noviembre, de martes a sábados en horario de 17,00 a 21,00 horas. Domingos y festivos de 12,00 a 14,00 h y de 17,00 a 21,00 h.
El artista: José Manuel González Ubierna
José Manuel González Ubierna nació en Salamanca el 15 de mayo de 1900 y, desde su juventud, ya se sintió interesado por la pintura. Su padre también pintaba y su madre le inculcó el interés por el arte al llevarle al Museo del Prado cada vez que acudía la familia a Madrid.
Con tan sólo 17 años comenzó a pintar con quien fuera su único maestro, D. Vidal González Arenal, a cuyo taller acudió durante tres años. Ubierna, a partir de entonces, se consideró autodidacta y su estilo se fue fraguando poco a poco, ajeno a movimientos y modas.
En 1925 expuso por primera vez en la Universidad de Salamanca junto con otros pintores locales. A partir de entonces su obra se colgó hasta en 44 ocasiones en salas de Salamanca, Madrid, Laredo, Valladolid o San Sebastián.
En vida recibió la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Salamanca, que le nombró Hijo Predilecto de la ciudad, y la Diputación de Salamanca le concedió la medalla de plata.
El tema principal en la obra de Ubierna siempre fue Salamanca, si bien tiene cuadros del París bohemio de los años 30 y muchos paisajes del norte, marinas y caseríos cántabros. Por la moda de bodegones y retratos se dejó llevar a mediados de siglo, y en ningún momento tuvo concesiones a lo abstracto. Viejas casas salmantinas, vistas de la ciudad y rincones ya desaparecidos se podrán observar en la muestra.
El estilo de Ubierna, aunque parezca unísono, no lo es tanto. Siempre fue costumbrista, de ahí que se interesara tanto por la ciudad y el pulular de sus habitantes, pero hay etapas en que gana la impresión que el artista tiene sobre la realidad.
Salamanca, de Ubierna a Perro Chico
En “Salamanca, de Ubierna a Perro Chico” el centro cultural La Salchichería presenta un spin off de la exposición principal y en sus salas se colgarán 6 cuadros del pintor salmantino junto a otras tantas fotografías del colectivo de fotógrafos “Perro Chico”, formado por los fotógrafos salmantinos Alberto Prieto, Marcos Rodríguez, María José Cambón, Manolo Barroso, Felipe Piñuela y Solete Casado.
No se trata de una interpretación exacta del cuadro, sino que el fotógrafo se ha colocado en el mismo enclave que se colocó González Ubierna y ha hecho una libre interpretación del encuadre en el momento actual. De esta forma se intenta acercar al pintor de la Salamanca del siglo XX al siglo XXI.
Hay pocas entradas en internet de González Ubierna y con esta acción se pretende hacer un Ubierna 2.0 para que los salmantinos, y los amantes del arte en general, descubran a uno de los artistas más emblemáticos que ha tenido nuestra ciudad a través de una recreación de los rincones que pintó, vistos en su estado actual por otro artista gráfico, ha explicado José Lomo.
La exposición muestra cuadros del artista propiedad de diferentes instituciones salmantinas y de colecciones privadas y está compuesta, no sólo por las famosas vistas de Salamanca, sino también por los cuadros de rincones ya desaparecidos de la ciudad del Tormes, así como las marinas y los paisajes norteños que el artista solía pintar en sus veranos en Cantabria.
La última gran exposición de González Ubierna tuvo lugar en Salamanca en el año 2000, con motivo del centenario de su nacimiento. En la presente exposición se exponen más de 60 obras del artista que supo recrear la Salamanca del siglo XX como pocos, ha dicho el comisario de la muestra.
Como complemento de la exposición, el espacio alternativo La Salchichería colgará en sus salas obras de Ubierna en la muestra titulada “Salamanca, de Ubierna a Perro Chico” en la que, junto a obras del pintor salmantino, se exhibirán fotografías del colectivo de fotógrafos “Perro Chico” que mostrarán los mismos rincones pintados por el artista, pero en su estado actual. Así, y como ejemplo, junto al cuadro del pintor “Casas de la Puerta del Río”, que data de 1960, se colgará una fotografía de las mismas dimensiones, con el mismo enclave, pero con la perspectiva actual de uno de los fotógrafos del colectivo.
Las dos exposiciones permanecerán abiertas del 6 de octubre al 20 de noviembre, de martes a sábados en horario de 17,00 a 21,00 horas. Domingos y festivos de 12,00 a 14,00 h y de 17,00 a 21,00 h.
El artista: José Manuel González Ubierna
José Manuel González Ubierna nació en Salamanca el 15 de mayo de 1900 y, desde su juventud, ya se sintió interesado por la pintura. Su padre también pintaba y su madre le inculcó el interés por el arte al llevarle al Museo del Prado cada vez que acudía la familia a Madrid.
Con tan sólo 17 años comenzó a pintar con quien fuera su único maestro, D. Vidal González Arenal, a cuyo taller acudió durante tres años. Ubierna, a partir de entonces, se consideró autodidacta y su estilo se fue fraguando poco a poco, ajeno a movimientos y modas.
En 1925 expuso por primera vez en la Universidad de Salamanca junto con otros pintores locales. A partir de entonces su obra se colgó hasta en 44 ocasiones en salas de Salamanca, Madrid, Laredo, Valladolid o San Sebastián.
En vida recibió la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Salamanca, que le nombró Hijo Predilecto de la ciudad, y la Diputación de Salamanca le concedió la medalla de plata.
El tema principal en la obra de Ubierna siempre fue Salamanca, si bien tiene cuadros del París bohemio de los años 30 y muchos paisajes del norte, marinas y caseríos cántabros. Por la moda de bodegones y retratos se dejó llevar a mediados de siglo, y en ningún momento tuvo concesiones a lo abstracto. Viejas casas salmantinas, vistas de la ciudad y rincones ya desaparecidos se podrán observar en la muestra.
El estilo de Ubierna, aunque parezca unísono, no lo es tanto. Siempre fue costumbrista, de ahí que se interesara tanto por la ciudad y el pulular de sus habitantes, pero hay etapas en que gana la impresión que el artista tiene sobre la realidad.
Salamanca, de Ubierna a Perro Chico
En “Salamanca, de Ubierna a Perro Chico” el centro cultural La Salchichería presenta un spin off de la exposición principal y en sus salas se colgarán 6 cuadros del pintor salmantino junto a otras tantas fotografías del colectivo de fotógrafos “Perro Chico”, formado por los fotógrafos salmantinos Alberto Prieto, Marcos Rodríguez, María José Cambón, Manolo Barroso, Felipe Piñuela y Solete Casado.
No se trata de una interpretación exacta del cuadro, sino que el fotógrafo se ha colocado en el mismo enclave que se colocó González Ubierna y ha hecho una libre interpretación del encuadre en el momento actual. De esta forma se intenta acercar al pintor de la Salamanca del siglo XX al siglo XXI.
Hay pocas entradas en internet de González Ubierna y con esta acción se pretende hacer un Ubierna 2.0 para que los salmantinos, y los amantes del arte en general, descubran a uno de los artistas más emblemáticos que ha tenido nuestra ciudad a través de una recreación de los rincones que pintó, vistos en su estado actual por otro artista gráfico, ha explicado José Lomo.