El viernes se estrena la obra "El sentidor ante su retrato" a cargo de la compañía Komo Teatro
La compañía Komo teatro estrena este viernes, en el Liceo, la obra “El sentidor ante su retrato”. Claudio Casero ha hecho una versión escénica del texto escrito por Francisco Blanco, que será interpretado por Félix Nieto, Jorge de la Gándara, Amalia de Prado, Natalia Mota, Petri García, Carmen Báez, Jacinto Hernández, Serafín Hernández y Julia Tabanes, entre otros.
Esta actividad ha sido organizada por la Asociación Amigos de Unamuno en colaboración con la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes y forma parte del Ciclo EscenAquí. Las entradas tienen un precio de 8 euros y están a la venta en la taquilla del Teatro Liceo y en la web www.ciudaddecultura.org
Sinopsis
Últimos suspiros de doña Concha Lizarra. Año 1934.Tras la muerte de Salomé, hija mayor de Unamuno, su viudo el poeta y ensayista José Mª Quiroga y Plá vive junto a su hijo Miguel con la familia Unamuno. Quiroga pretende a su cuñada Felisa, lo que crea un aparente desajuste familiar dentro de un marco de agonía, del rememorar de una vida y de un inestable e imprevisible futuro. Concha esposa y madre de Don Miguel, se transforma en el eco y arrullo de una vida de amor y lucha. Queda fijado un marco indivisible de un sentidor ante su retrato.
Esta actividad ha sido organizada por la Asociación Amigos de Unamuno en colaboración con la Fundación Salamanca Ciudad de Cultura y Saberes y forma parte del Ciclo EscenAquí. Las entradas tienen un precio de 8 euros y están a la venta en la taquilla del Teatro Liceo y en la web www.ciudaddecultura.org
Sinopsis
Últimos suspiros de doña Concha Lizarra. Año 1934.Tras la muerte de Salomé, hija mayor de Unamuno, su viudo el poeta y ensayista José Mª Quiroga y Plá vive junto a su hijo Miguel con la familia Unamuno. Quiroga pretende a su cuñada Felisa, lo que crea un aparente desajuste familiar dentro de un marco de agonía, del rememorar de una vida y de un inestable e imprevisible futuro. Concha esposa y madre de Don Miguel, se transforma en el eco y arrullo de una vida de amor y lucha. Queda fijado un marco indivisible de un sentidor ante su retrato.