El Museo de la Historia de la Automoción presenta una nueva exposición fotográfica bajo el título "Fetiches de dos y cuatro ruedas"
El Museo de la Historia de la Automoción de Salamanca ha inaugurado hoy la exposición fotográfica ‘Fetiches de dos y cuatro ruedas’, de Aitor Cosín Cabero, que podrá visitarse hasta el próximo 18 de junio.
El concejal de Cultura, Julio López Revuelta, destacó que con esta muestra el Museo abre su Sala de Exposiciones Temporales a nuevas perspectivas artísticas que toman el ámbito de la automoción para interpretarlo y ofrecer un resultado repleto de creatividad.
En esta ocasión, cerca de una treintena de fotografías pueden contemplarse en las paredes de la sala, que el año pasado fueron ocupadas por lienzos de similar temática, obra del pintor José Luis Lugo. El resultado, imágenes de una gran calidad técnica con una composición y encuadres muy elaborados.
El actual proyecto del fotógrafo afincado en Valladolid, Aitor Cosín Cabero, se encuentra en constante evolución y explora el mundo de los vehículos clásicos de dos y cuatro ruedas. Singulares fetiches que han llegado hasta nuestros tiempos y que, a día de hoy, continúan suponiendo un especial atractivo para gran parte de los aficionados al motor y para el resto de ciudadanos. Su exposición ya ha recorrido distintos puntos de la península.
El concejal de Cultura, Julio López Revuelta, destacó que con esta muestra el Museo abre su Sala de Exposiciones Temporales a nuevas perspectivas artísticas que toman el ámbito de la automoción para interpretarlo y ofrecer un resultado repleto de creatividad.
En esta ocasión, cerca de una treintena de fotografías pueden contemplarse en las paredes de la sala, que el año pasado fueron ocupadas por lienzos de similar temática, obra del pintor José Luis Lugo. El resultado, imágenes de una gran calidad técnica con una composición y encuadres muy elaborados.
El actual proyecto del fotógrafo afincado en Valladolid, Aitor Cosín Cabero, se encuentra en constante evolución y explora el mundo de los vehículos clásicos de dos y cuatro ruedas. Singulares fetiches que han llegado hasta nuestros tiempos y que, a día de hoy, continúan suponiendo un especial atractivo para gran parte de los aficionados al motor y para el resto de ciudadanos. Su exposición ya ha recorrido distintos puntos de la península.