El Ayuntamiento mejora una de las entradas de la ciudad con la creación de un nuevo mirador y zona ajardinada paralela a la Muralla en el Paseo de San Vicente
El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, ha visitado hoy el nuevo mirador y zona ajardinada paralela a la Muralla en el Paseo de San Vicente que el Ayuntamiento de Salamanca ha impulsado para mejorar una de las principales entradas de la ciudad y ofrecer un nuevo espacio para el disfrute de las personas.
De este modo, se ha puesto en valor esta zona, ubicada en las proximidades del Cerro de San Vicente, donde se conservan los restos arqueológicos de la aldea originaria de la ciudad de Salamanca, y se ha mejorado sustancialmente esta zona de la ciudad.
Esta parcela carecía de uso y era inaccesible. Gracias a esta actuación, las personas pueden entrar en este nuevo espacio ajardinado a través de dos accesos peatonales desde el paseo de San Vicente.
En este nueva zona pública con una superficie de 2.600 metros cuadrados y una longitud de 115 metros lineales, se han creado caminos de terrizo y tres parterres, ajardinados con plantas arbustivas y aromáticas como abelia, berberi o lavandas. Se ha plantado, además, hiedra para tapizar la zona más escarpada y dar continuidad al muro vegetal de la zona sur del Teso de San Nicolás.
Los paseos de tierra están delimitados por una valla y disponen de luminarias led, de bajo consumo energético, como guía.
Estos trabajos se han completado con la decoración del muro de la valla del Colegio Mayor Hernán Cortés con un grafiti ornamental con la naturaleza como protagonista.
Este proyecto, que ha permitido sumar una nueva zona verde y mirador para el espaciamiento de ciudadanos y visitantes, ha sido posible gracias a un presupuesto de 59.928,21 euros.
Tras la mejora de este espacio en el Paseo de San Vicente, el Ayuntamiento iluminará artísticamente este nuevo tramo de la Muralla dando continuidad al realce de la Cerca Antigua en el Paseo Rector Esperabé, hasta la calle San Pablo.
Zona ajardinada en la calle Vaguada de la Palma
Esta actuación se suma a la nueva zona ajardinada y a la mejora de accesibilidad que el Ayuntamiento ha impulsado recientemente en el último tramo de la calle Vaguada de la Palma, frente a la Instituto que lleva el mismo nombre que la vía, para dignificar otra de las entradas a la ciudad, en el casco histórico, y facilitar la accesibilidad a las personas con movilidad reducida.
Esta iniciativa municipal ha sumado a la ciudad 465 metros cuadrados de zonas verdes en una parcela que se encontraba en tierra y era utilizada como aparcamiento improvisado al que se accedía atravesando la acera.
No sólo se ha creado un nuevo espacio verde, sino también se ha ampliado la acera del último tramo de esta vía para mejorar la accesibilidad de las personas con dificultades de movilidad.
Las obras, con un presupuesto de casi 27.000 euros, han comprendido, además, la limpieza y el saneamiento de un tramo de la muralla bajo la supervisión del arqueólogo municipal. Estas labores se han realizado manualmente para garantizar la seguridad de la cerca antigua.
Con el objetivo de respetar el entorno bajo el Teso de San Vicente, se ha construido un murete forrado en granito igual al ya existente en dicha zona.
Estas mejoras se enmarcan en las actuaciones impulsadas por el Ayuntamiento para mejorar los espacios abiertos y dotar a la ciudad de nuevas zonas ajardinadas para hacer de Salamanca una ciudad más humana y amable para las personas.
De este modo, se ha puesto en valor esta zona, ubicada en las proximidades del Cerro de San Vicente, donde se conservan los restos arqueológicos de la aldea originaria de la ciudad de Salamanca, y se ha mejorado sustancialmente esta zona de la ciudad.
Esta parcela carecía de uso y era inaccesible. Gracias a esta actuación, las personas pueden entrar en este nuevo espacio ajardinado a través de dos accesos peatonales desde el paseo de San Vicente.
En este nueva zona pública con una superficie de 2.600 metros cuadrados y una longitud de 115 metros lineales, se han creado caminos de terrizo y tres parterres, ajardinados con plantas arbustivas y aromáticas como abelia, berberi o lavandas. Se ha plantado, además, hiedra para tapizar la zona más escarpada y dar continuidad al muro vegetal de la zona sur del Teso de San Nicolás.
Los paseos de tierra están delimitados por una valla y disponen de luminarias led, de bajo consumo energético, como guía.
Estos trabajos se han completado con la decoración del muro de la valla del Colegio Mayor Hernán Cortés con un grafiti ornamental con la naturaleza como protagonista.
Este proyecto, que ha permitido sumar una nueva zona verde y mirador para el espaciamiento de ciudadanos y visitantes, ha sido posible gracias a un presupuesto de 59.928,21 euros.
Tras la mejora de este espacio en el Paseo de San Vicente, el Ayuntamiento iluminará artísticamente este nuevo tramo de la Muralla dando continuidad al realce de la Cerca Antigua en el Paseo Rector Esperabé, hasta la calle San Pablo.
Zona ajardinada en la calle Vaguada de la Palma
Esta actuación se suma a la nueva zona ajardinada y a la mejora de accesibilidad que el Ayuntamiento ha impulsado recientemente en el último tramo de la calle Vaguada de la Palma, frente a la Instituto que lleva el mismo nombre que la vía, para dignificar otra de las entradas a la ciudad, en el casco histórico, y facilitar la accesibilidad a las personas con movilidad reducida.
Esta iniciativa municipal ha sumado a la ciudad 465 metros cuadrados de zonas verdes en una parcela que se encontraba en tierra y era utilizada como aparcamiento improvisado al que se accedía atravesando la acera.
No sólo se ha creado un nuevo espacio verde, sino también se ha ampliado la acera del último tramo de esta vía para mejorar la accesibilidad de las personas con dificultades de movilidad.
Las obras, con un presupuesto de casi 27.000 euros, han comprendido, además, la limpieza y el saneamiento de un tramo de la muralla bajo la supervisión del arqueólogo municipal. Estas labores se han realizado manualmente para garantizar la seguridad de la cerca antigua.
Con el objetivo de respetar el entorno bajo el Teso de San Vicente, se ha construido un murete forrado en granito igual al ya existente en dicha zona.
Estas mejoras se enmarcan en las actuaciones impulsadas por el Ayuntamiento para mejorar los espacios abiertos y dotar a la ciudad de nuevas zonas ajardinadas para hacer de Salamanca una ciudad más humana y amable para las personas.