El Ayuntamiento de Salamanca renueva su colaboración con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida
La concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Ana Suárez Otero, ha reafirmado el compromiso del Ayuntamiento de Salamanca con las mujeres víctimas de trata y mujeres que ejercen la prostitución en la ciudad de Salamanca, a través de renovación del convenio de colaboración con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida (APRAMP).
Este convenio, dotado de una cuantía de 9.500 euros, busca el desarrollo de programas de sensibilización, prevención, promoción, e inserción que permitan hacer frente a la exclusión social y erradicar los estereotipos de rechazo social y las actitudes negativas hacia el colectivo. La Concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades ha señalado: “No debemos mirar para otro lado, la prostitución no solo existe sino que es visible. Son mujeres sin derechos, en ocasiones casi niñas, que se exponen, especialmente ahora, a un grave riesgo sanitario. Hay que articular los medios necesarios para que reciban asistencia y no se vean forzadas a realizar una actividad que pueda generar focos de propagación del Covid-19 y suponer un peligro para ellas mismas”, afirmó.
El objetivo final del convenio es prevenir y ofrecer una atención integral al colectivo de mujeres que ejercen la prostitución. El programa se desarrolla a través de un servicio de información, asesoramiento y apoyo, para recuperarse física, psíquica y socialmente; campañas de sensibilización a la población; acciones preventivas en los ambientes donde existe prostitución y droga; y detección de necesidades a través del contacto directo con mujeres prostituidas con itinerarios individualizados de inserción.
Intervención durante el estado de alarma
Durante el estado de alarma decretado por la pandemia por Covid-19, “el Ayuntamiento de Salamanca y APRAMP hemos trabajado estrechamente para garantizar la cobertura de necesidades básicas de las mujeres prostituidas que solicitaban ayuda para no verse obligadas a ejercer esta actividad”, señaló Ana Suárez. Con ese objetivo se proporcionaron servicios de comida a domicilio, alojamiento y cobertura de necesidades básicas.
Datos de 2019
Durante el año pasado, 444 mujeres acudieron al Centro de Acogida de APRAMP para buscar ayuda. El perfil mayoritario fue de mujer inmigrante (un 92,5%), con grandes cargas familiares, situación de vulnerabilidad en país de origen, una edad cada vez más baja, situándose el rango de edad en la mayoría de los casos entre 18 y 34 años, siendo los pisos particulares el contexto donde mayoritariamente ejercía su actividad.
Las actuaciones desarrolladas se orientaron a ofrecer respuesta a las necesidades que cada mujer presentaba. En concreto, durante el año 2019 se realizaron 227 entregas de alimentos, 504 intervenciones en atención psicológica, 302 sesiones individuales y grupales de orientación laboral y manejo de las nuevas tecnologías de la comunicación, 3.089 intervenciones dentro del servicio de asistencia jurídica y social, 104 mujeres itinerarios de orientación laboral, de los cuales 45 consiguieron un puesto de trabajo que les permitió abandonar la prostitución.