Instalaciones Fotovoltaicas
Instalaciones Fotovoltaicas
Proyectos de instalación solar fotovoltaica para autoconsumo en dependencias municipales
El Sol es de las fuentes de energía a la que se le presta más atención, y en la que se centra gran parte de la investigación en materia de energías alternativas, no en vano se trata de una energía totalmente limpia y 100% renovable. Más aun, salvo por su intervención en el ciclo ecológico, los humanos aprovechamos una ínfima parte. A pesar de ello, existe una gran diversidad de sistemas que permiten aprovechar esta energía.
Los sistemas de energía fotovoltaica permiten la transformación de la luz solar en energía eléctrica, es decir, la conversión de una partícula luminosa con energía (fotón) en una energía electromotriz (voltaica).
El elemento principal de un sistema de energía fotovoltaica es la célula fotoeléctrica, un dispositivo construido de silicio (extraído de la arena común). Los paneles solares están constituidos por cientos de estas células, que conexionados adecuadamente suministran voltajes suficientes para, por ejemplo, la recarga de baterías. Tienen utilidad en múltiples campos, desde el ámbito doméstico, hasta los satélites artificiales.
Para construir una célula se utiliza arena común con alto contenido en silicio. Se obtiene inicialmente una barra de silicio sin estructura cristalina (amorfo), una vez separados sus dos componentes básicos, y que acoge gran cantidad de impurezas.
Mediante un proceso químico, que también permite eliminar las impurezas, la barra de silicio amorfo es transformada en una estructura monocristalina, la cual posee características de aislante eléctrico, al estar formada por una red de uniones atómicas altamente estables (los cuatro electrones de la capa de valencia de los átomos de silicio tienen enlaces covalentes con los demás).
A continuación se corta el material en obleas (finas láminas de sólo una décima de milímetro). Las obleas son entonces fotograbadas en celdillas con polaridades positiva y negativa; la polaridad positiva se consigue a base de introducir lo que electrónicamente hablando se denominan huecos, es decir, impurezas que están compuestas por átomos que en su capa de valencia sólo tienen tres electrones (les falta un electrón para completar los cuatro que precisa para ser estable, por eso se dice que tienen un hueco). Por su parte, en la zona negativa se sigue un proceso similar al de la zona positiva, pero en este caso las impurezas que se inyectan son átomos que en su capa de valencia tienen cinco electrones, es decir, en la estructura de cristal sobra un electrón (existe un electrón libre, por eso se dice que es una carga negativa).
El conjunto de ambos materiales (positivos y negativos) forman un diodo; este dispositivo tiene la característica de dejar pasar la corriente eléctrica en un sentido, pero no en el otro, y aunque los diodos son utilizados generalmente para rectificar la corriente eléctrica, en este caso, permitiendo la entrada de luz en la estructura cristalina del diodo permitiremos que se produzca movimiento de electrones dentro del material, por eso este diodo es denominado más concretamente fotodiodo o célula fotoeléctrica.
Cuando la energía luminosa incide en la célula fotoeléctrica, existe un desprendimiento de electrones de los átomos que comienzan a circular libremente en el 2 material. Si medimos el voltaje existente entre los dos extremos del material (positivo y negativo) observaremos que existe una diferencia de potencial entre 0,5 y 0,6 voltios. Si le aplicamos una carga eléctrica, veremos que es posible obtener una corriente de 28 miliamperios por cada centímetro cuadrado iluminado. Hemos convertido el dispositivo en una especie de batería eléctrica, que permanecerá aportando energía indefinidamente en tanto reciba iluminación.
El Ayuntamiento de Salamanca en su compromiso con la atenuación del cambio climático y la apuesta por una energía segura, sostenible y asequible, aprobó en Pleno su adhesión al Pacto de Alcaldes para el Clima y la Energía Sostenible, con fecha 30 de diciembre de 2016. Tal y como se firmó en su adhesión al pacto, el Ayuntamiento de Salamanca se comprometió a reducir sus emisiones de CO2 en un 40% en el año 2030, mediante la mejora de la eficiencia energética y un mayor uso de fuentes de energía renovables, a través de medidas de mitigación. Asimismo, los proyectos objeto de la presente licitación se han presentado a la “Primera Convocatoria de Ayudas a la inversión en instalaciones de producción de energía térmica y fotovoltaica con fuentes de energía renovable en la Comunidad Autónoma de Castilla y León cofinanciadas con Fondos de la Unión Europea”, habiendo resultado beneficiarios en las propuestas provisionales formuladas por el Director General del IDAE con fecha del 11 de noviembre de 2021.
Por otro lado, estas actuaciones están encuadradas dentro del Plan de ahorro y eficiencia energética del Ayuntamiento de Salamanca, y contribuirán con la estrategia Europea de reducción de las emisiones contaminantes mediante la eficacia energética.
Instalaciones ejecutadas gracias a los fondos europeos:
- Cuartel de la Policía Local de Salamanca
- Parque de Bomberos de Salamanca
- Centro municipal integrado de Vistahermosa
- Centro municipal integrado Julián Sánchez el Charro
Cuartel de la Policía Local de Salamanca
Nº de placas: 232
Potencia instalada: 117,16 KW
Producción fotovoltaica estimada: 178.757 kwh/año
Inversión total: 92.195,14 €
Importa ayuda FEDER: 38.796,00 €
Parque de Bomberos de Salamanca
Nº de placas: 120
Potencia instalada: 60 KW
Producción fotovoltaica estimada: 92.406 kwh/año
Inversión total: 53.528,15 €
Importa ayuda FEDER: 38.796,00 €
Centro municipal integrado de Vistahermosa
Nº de placas: 73
Potencia instalada: 36,5 KW
Producción fotovoltaica estimada: 51.439 kwh/año
Inversión total: 35.505,49 €
Importa ayuda FEDER: 13.621,00 €
Centro municipal integrado Julián Sánchez el Charro
Nº de placas: 191
Potencia instalada: 95,5 KW
Producción fotovoltaica estimada: 147.356 kwh/año
Inversión total: 78.696,04 €
Importa ayuda FEDER: 38.796,00 €