Logo Ayuntamiento de Salamanca

Visualización del menú

Salamanca ha acogido hoy el fallo del Premio de la Crítica que concede cada año desde 1956 la Asociación Española de Críticos Literarios. El jurado, formado por una veintena de miembros de esta asociación que realizan crítica literaria en los medios de comunicación, se ha reunido en la capital salmantina con motivo del centenario del nacimiento de Carmen Martín Gaite que se conmemora en este 2025 con un amplio programa de actividades. El veredicto se ha dado a conocer en una rueda de prensa en la Torre de los Anaya con la presencia del presidente de la Asociación Española de Críticos Literarios, Fernando Valls, y del concejal de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Salamanca, Ángel Fernández, además de todos los miembros del jurado.

El Premio de la Crítica destaca cada año a las mejores obras literarias, publicadas en España en las categorías de narrativa y poesía. Los premios no tienen dotación económica, pero sí un singular prestigio entre escritores, editores y lectores.

Es el único premio que se concede en las cuatro lenguas oficiales del Estado; en castellano, desde 1956; y en catalán gallego y euskera, a partir de 1976. Desde 2021 se premia además el mejor libro de lengua extranjera traducido a cualquiera de estas lenguas.

La historia del Premio de la Crítica forma parte de la historia de la literatura contemporánea y entre los galardonados figuran Cela, Sánchez Ferlosio, Gonzalo Torrente Ballester, Ana María Matute, Delibes, Vargas Llosa, Cristina Fernández Cubas, Eduardo Mendoza, Muñoz Molina, Landero, Marsé, Javier Marías, Andrés Neuman, Fernando Aramburu, y poetas como Celaya, Blas de Otero, Vicente Aleixandre, Octavio Paz, Antonio Colinas, María Victoria Atencia, Valente, Luis Rosales, Benítez Reyes, Guillermo Carnero, García Montero, Elvira Lacaci, Julia Uceda, Juana Castro, Raquel Lanseros…

Premio de la Crítica en Lengua Gallega

Narrativa: Tras do ceo, Manuel Rivas (Xerais).

El título de la novela alude al lugar donde transcurre la acción, un lugar que se resiste a la identificación referencial y, al tiempo, epítome de muchas de las Galicias reales y posibles. Un lugar en el que impera el orden de lo natural y, por tanto, al que solo algunos humanos, privilegiados por ser ‘diferentes’, tienen acceso. Como Dombodán, un viejo conocido para el público de Rivas. Es así como surge un conflicto entre valores contrapuestos que se desarrolla en una especie de mundo al revés, en el que la marginalidad se convierte en protagonista y en el que los seres no productivos acaban por ser los más funcionales.

Las clásicas preocupaciones del autor –la violencia y el poder como vectores estructurantes de las relaciones interpersonales, la destrucción del hábitat- reaparecen en un relato de elevada intensidad emocional compensada con bien dosificadas dosis de ironía e ingenio.

La novela supone pues el reencuentro con una voz absolutamente canónica que aquí demuestra -una vez más- su asombrosa capacidad de evolucionar permaneciendo fiel a un proyecto literario propio, singularísimo e inconfundible

Poesía: Poemas realistas, Daniel Salgado (Apiario).

Desde un realismo que atiende de igual manera a los objetos de la naturaleza como a retos sociales tales como el capitalismo salvaje, la ética política o el ecologismo, el autor formula interrogaciones reflexivas que pretenden superar el pesimismo y abrir, como legado, un camino a la resistencia y a la libertad.

Destaca la frescura y la actualidad de una poesía social renovada que cuida con esmero las imágenes, al mismo tiempo que reivindica la autonomía del objeto artístico. La construcción del poema, circular y aparentemente caótica, reproduce el poder de lo contingente dentro y fuera de la biología, no sólo como problema sino como posibilidad. En este sentido, se acogen nuevos marcos conceptuales para transformarlos en impresiones líricas que apelan tanto a la acción como al pensamiento.

Daniel Salgado (Monterroso, 1981). Periodista, poeta y músico, aunque también está muy próximo al mundo audiovisual. Actualmente colabora en elDiario.es Galicia. Como poeta se inició muy joven con Sucede (Espiral Maior, 2004), por el que recibió el premio Uxío Novoneyra en 2002. También se hizo con el Premio Esquía de poesía en 2004 con Días no imperio y con el Gonzalo López Abente en 2013 con Os tempos sombrizos.

Premio de la Crítica en Lengua Catalana

Narrativa: Les platges del clatell, de Joan Vigó (Barcelona, LaBreu Edicions, 2024).

Les platges al clatell es un artefacto literario compuesto por diversos archivos, voces, tiempos o géneros que acaban por cristalizar en una obra audaz, revisitación oportuna y merecida de la vanguardia del siglo XX. Su autor, Joan Vigó (Barcelona, 1964), va tejiendo esta urdimbre a partir de escenas de vida de un elenco de artistas que tuvieron la convicción de que su existencia era parte indisociable de su arte.

El personaje central de esta yuxtaposición es Berta Epstein, amante de Picabia, y autora de unos versos que Joan Vigó, autor y personaje, encuentra y traduce dentro de Les platges al clatell.

Con un registro casual que rehúye cualquier arrogancia impostada, Joan Vigó revalida de manera brillante toda esta herencia vanguardista. Les platges al clatell es su más apasionado y aplicado recordatorio.

Poesía: Arnau, de Adrià Targa (Barcelona, Edicions Proa, 2024).

Adrià Targa (Tarragona, 1987) despide la juventud con Arnau, una obra alucinada que no ha dejado indiferente a los lectores de poesía catalana, como tampoco a una crítica que ha registrado el valor señero que esta obra alcanza para toda una generación.

Arnau es un poema elegíaco, contrapuntado de una ironía persistente y situado en un espacio concreto, el Raval barcelonés, un barrio en permanente mutación, por cuyas calles deambulan personajes sin acomodo, sedientos de un deseo que no van a colmar. Algo de barroco (empezando por la cubierta del volumen) subyace a lo largo y ancho de Arnau, en la construcción de un “mundo del morir”, exento de gravedad, pero que configura todas y cada una de las situaciones presentadas.

Eros y Thanatos no es una pista de baile extraña para la poesía, como tampoco no lo es la voluntad de los poetas para transcender estas dos pulsiones. Adrià Targa lo ha contado en unos versos, en un momento y en un espacio en estado de gracia, que sin duda merecen ser recordados y celebrados.

Premio de la Crítica en Lengua Vasca

Narrativa: Zoriona, edo antzeko zerbait. Karmele Mitxelena. (Elkar).

La novela Zoriona, edo antzeko zerbait [La felicidad o algo parecido] de Karmele Mitxelena (1988) presenta la decisión de volver a disfrutar de  la vida que toma una mujer, tras tres años de luto por el suicidio de su marido, cuando vuelve a aparecer en su vida un viejo amor, Contenido: Presentar el libro.

La aparente sencillez argumental se ve enriquecida por el uso de varios registros de estilo que utiliza la autora, quien con mano sabia ha sabido enhebrar varios niveles narrativos con un tapiz simbólico que ofrece profundidad a la obra.

 Karmele Mitxelena (Oiartzun Giupuzkoa, 1988) representa una de las voces más prometedoras de la actual narrativa vasca. En 2022 ganó con el libro de relatos Haragizko mamuak [Fantasmas de carne y hueso] el prestigioso Premio Kutxa-Donostia a libro de relatos.

Poesía: Urrats galduen hotsa. Luis Garde. (Pamiela).

El libro de poemas de Luis Garde Urrats galduen hotsa presenta un calendario de un año completo, desde octubre a abril, que compone un diario personal sobre la percepción personal del paso del tiempo.

Si bien se trata de un tema universal, la voz poética de Luis Garde muestra características especiales en su tratamiento, por su voz que es capaz de entroncar visión de la naturaleza, sentido personal y conciencia colectiva en una expresión verbal que se acerca al aforismo.

Luis Garde (Iruñea, Pamplona 1961) es uno de los autores más señeros del sistema literario. Ganó el Premio Euskadi en 2016 por la novela Ehiztarien isilaldia (2015), que fue traducida con el título de El silencio del cazador (2016), en torno a la fuga de los presos republicanos del fuerte de San Cristóbal. 

Premio de la Crítica en Lengua Castellana

Narrativa: Tarántula, de Eduardo Halfon (Libros del Asteroide).

Tarántula es una novela espléndida y sobrecogedora en su dimensión estética y ética. Destaca la maestría de su composición -donde la complejidad de la trama y sus distintos planos temporales se hacen casi imperceptibles-.  Aborda temas universales: la violencia, el terror, el exilio, la búsqueda de la propia identidad, la memoria y los mecanismos siniestros del poder absoluto desde herramientas como el odio y el miedo. Sobresale su hondura humana y su estilo elegante, sobrio y lúcido, que esquiva con inteligencia cualquier maniqueísmo -sin evitar sin embargo posicionarse-. Plantea con eficacia algunos de los grandes temas de nuestro tiempo a través de espacios tan cargados de sentido como la Guatemala de la dictadura y la guerrilla o el Berlín de las grandes heridas del siglo XX.

Halfon nació en Guatemala; ha publicado 20 obras, entre las que destacan El boxeador polaco, Canción o Duelo; en 2018 recibió el Premio Nacional de Literatura en Guatemala. En la breve extensión de Tarántula se contiene una gran novela llamada a ocupar un espacio relevante en la historia de nuestras letras.

Poesía: El que menos sabe, de Tomás Sánchez Santiago (editorial Eolas).

El premio de la AECL, en su apartado de poesía en castellano, ha recaído por rotunda unanimidad sobre el poeta zamorano Tomás Sánchez Santiago y su obra El que menos sabe, publicada en la editorial leonesa Eolas.

El jurado ha destacado que se trata de una entrega fundamental en la trayectoria del autor por su organicidad estructural, su lograda confluencia de formas expresivas híbridas, su atención a las imágenes -sin renunciar en ningún momento a la sobriedad- y el acierto con que plasma su característica mirada desobediente: no olvidemos que ya se había presentado en un poemario anterior como El que desordena (2006) y que ahora, desde el título, se identifica con una ignorancia radical.

Gracias a ella escucha, de forma privilegiada, “el murmullo del mundo” y, atento a los márgenes, se detiene en “la belleza de lo pequeño” para abordar temas como la memoria, la vulnerabilidad, la infancia o la asunción de la propia orfandad.

Premio de la Crítica en Lengua Extranjera

Baumgartner, de Paul Auster, Editorial Seix Barral, traducción al castellano de Benito Gómez Ibáñez; y en Edicions 62, traducido al catalán por Ernest Riera.

El protagonista de esta novela es en algunos aspectos un alter ego del propio Paul Auster: un intelectual con raíces familiares ucranianas, judío y de New Jersey. Se sabe a las puertas de la senectud y dedica su tiempo a redactar un libro y la crónica de su viaje reciente a Ucrania, dejándose llevar por los recuerdos, desde su infancia hasta el dolor por la muerte reciente de Anna, la mujer con la que ha compartido más de 30 años.

El jurado ha destacado la composición de la novela, en la que hay metaliteratura, diferentes perspectivas de narrador y un acercamiento al fluir de la conciencia para recuperar la memoria del pasado. Añade una mirada existencial y se pregunta por el azar, el destino, la soledad y el sentido de la muerte.

Paul Auster (Nueva Jersey, 1947-Nueva York, 2024) ha publicado más de veinte libros, entre los que destacan La invención de la soledad, Ciudad de cristal, El Palacio de la Luna, La música del azar o Leviatán. En 2006 recibió el premio Príncipe de Asturias de las Letras.

Widget es util la página