La exposición del escultor salmantino Agustín Casillas, que actualmente se puede visitar en la Torre de los Anaya, se amplía hasta el mes de marzo
La exposición conmemorativa del centenario del nacimiento del escultor salmantino Agustín Casillas, que actualmente se puede visitar en la Torre de los Anaya, se amplía hasta el próximo 6 de marzo. Esta muestra está organizada conjuntamente por el Ayuntamiento y la Diputación, en colaboración con la familia del escultor.
En ella se exponen obras por primera vez, como “Pícara Justina y el estudiante”, “La hospitalidad charra” o “Sembrador”, así como la última obra realizada por Agustín Casillas antes de su fallecimiento, que fue bautizada con el nombre de “Alegoría a Salamanca”.
También se muestran cuadros de dibujos realizados por el artista a lo largo de su vida que tratan los tres temas más queridos por Agustín Casillas y más representados en sus obras: la figura femenina, el retrato y la figura rural. Están realizados en distintos materiales, como plumilla, carboncillo, tinta o pinturas.
La exposición incluye un total de sesenta y dos obras, entre las que se encuentran veinte dibujos, seis relieves y treinta y seis esculturas realizadas en barro cocido, escayola, hormigón, bronce o alabastro.
Se podrá visitar hasta el 6 de marzo en el centro cultural “Torre de los Anaya”, ubicado en la calle San Pablo, y la entrada es gratuita. El horario de apertura es de martes a viernes, de 17:00 a 21:00 horas; y sábados, domingos y festivos (salvo lunes) de 12:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00 horas.
Breve reseña biográfica de Agustín Casillas
Nació el 2 de octubre de 1921 en Salamanca, estudió dibujo en la Escuela de Bellas Artes de San Eloy y, posteriormente, en Artes y Oficios de Salamanca. Ha sido distinguido con numerosos premios y reconocimientos a lo largo de su extensa trayectoria artística, entre los que destacan el Primer Premio Nacional de Escultura, la Primera Medalla Nacional de Escultura, el Primer Premio Regional de Escultura o la Medalla de Oro de la ciudad de Salamanca en 2015.
Ha realizado numerosas esculturas de carácter público que se encuentran en su mayor parte ubicadas en Salamanca. Entre sus esculturas están la del Lazarillo y el ciego, junto al Puente Romano de la ciudad; la de La Celestina, en el Huerto de Calixto y Melibea; el busto de Diego de Torres Villarroel; la escultura de Rafael Farina que se encuentra en la Vaguada de la Palma; o el medallón dedicado a Cervantes en la Plaza Mayor de Salamanca, entre otras muchas.