El Ayuntamiento de Salamanca continúa con su política de puesta en valor del patrimonio monumental de la ciudad mediante intervenciones de conservación y mantenimiento que, a su vez, permiten la creación de empleos consolidados vinculados a la musealización de los espacios. Una de las últimas actuaciones es el acondicionamiento de la fachada de la iglesia de San Millán, sede de Monumenta Salmanticae.

Con una inversión en torno a 75.000 euros, se han llevado a cabo actuaciones de conservación y restauración necesarias para evitar el deterioro producido en la zona de cornisas y balaustradas por las inclemencias del agua y el paso del tiempo.

La Iglesia de San Millán acoge un recorrido por el patrimonio arquitectónico y urbano de la ciudad  en un espacio innovador y singular. La visita se apoya en recreaciones virtuales, infografía y otros elementos audiovisuales que reflejan cerca de 140 edificios y espacios urbanos.

Desde este centro de interpretación se pueden conocer los monumentos y espacios urbanos de la zona histórica de Salamanca y comprender por qué la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declaró a Salamanca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Desde el año 2011, la inversión municipal en patrimonio supera los 10 millones de euros, con actuaciones tan relevantes como la rehabilitación y musealización de la Torre de las Campanas de la Catedral y de las Torres de la Clerecía, la recuperación y apertura al público del Pozo de Nieve, la iluminación del Mercado Central, la limpieza, saneamiento y consolidación del Puente de Enrique Estevan, la reforma del solar del Patio Chico, la reforma de las cubiertas y soportales de la Plaza Mayor, la apertura de un mirador en la Iglesia de San Esteban o la apertura del propio Centro de Interpretación de las Murallas Salmantinas.

Durante este mandato, el Ayuntamiento de Salamanca ha acometido el acondicionamiento del solar del Botánico para convertir los restos arqueológicos que alberga en un nuevo atractivo turístico y la restauración de la Torre de Anaya para su transformación en un edificio de uso cultural. También se ha llevado a cabo el acondicionamiento de las laderas del Cerro de San Vicente para su transformación en una gran área verde con senderos peatonales y miradores que permiten la llegada a pie de salmantinos y turistas al lugar donde se conservan los restos de la aldea originaria de la ciudad a través de un nuevo e interesante recorrido patrimonial.